A decir verdad, la primera vez que los probé no fue precisamente aquí, sino en Cuba. Por eso, cuando tuve la suerte de verlos en un menú canario, me llamó la atención. Pregunté y me dijeron que aquello era una típica receta canaria, y que tal vez si lo había visto en Cuba era porque la llevaran allí los conquistadores españoles o portugueses.

Se trata de los huevos moles, una receta que se prepara de manera muy sencilla y básica, y que no tiene demasiada dificultad. Os lo puedo asegurar yo mismo, que no soy precisamente un manitas para la cocina.

Ingredientes básicos

• Ocho yemas de huevo
• 200 gramos de azúcar
• 400 cc de agua

Para preparar unos buenos huevos moles canarios, sólo nos hace falta verter azúcar en una olla y sobre ella el doble de agua para elaborar un almíbar muy dulce.

Aquello se mueve bien mientras hierve para que el azúcar se disuelva correctamente y luego se deja enfriar. Mientras se enfría, podéis ir batiendo las yemas, a las que más tarde se les añade el almíbar. Lo mejor es hacer esto mientras se bate las yemas. El resultado de todo esto se coloca al baño María, y luego se vierte en vasos o copas que se meten en la nevera, para servirse fríos y con gofio espolvoreado.

Parece ser que en Portugal también son muy comunes los postres elaborados a partir de huevos, como los ovos moles de Aveiro. Al parecer, la receta de los huevos moles es muy antigua, sean del lugar que sean. También hay mucha gente que le da un toque de canela y limón, para que cojan un mayor sabor.

La verdad es que los huevos moles son una receta y un postre muy típicos canarios que seguramente veréis en cualquier restaurante. Para la época del verano son geniales y muy fresquitos. Eso sí, recuerda que tienen un alto componente calórico por las yemas de huevo y el azúcar. Pero un día es un día, así que no dejéis de probarlos cuando estéis en Canarias.