Como en el caso de otras antiguas civilizaciones perdidas, la esplendorosa cultura de los indios Anasazi (que se traduce como «los antiguos») desapareció, dejándonos multitud de construcciones y restos arqueológicos, pero ni la más mínima pista acerca de los motivos que propiciaron su éxodo o exterminio.

Los Anasazi provenían originariamente de Nuevo México y extendieron su influencia por la zona en la que este converge con Utah, Arizona y Colorado (conocida como «las 4 esquinas»), comenzando su expansión allá por el siglo X.

Los Anasazi dominaban la astronomía, la agricultura y eran capaces de construir impresionantes asentamientos, siendo el más espectacular de todos el de «El Chaco», una ciudad-templo que marcó su época de esplendor. También hay importantes asentamientos Anasazi en Mesa Verde, Pueblo Bonito o Cedar Mesa, entre otros lugares (se han registrado más de 400 asentamientos de este tipo).

Después de emigrar varias veces hacia el norte y abandonando cada asentamiento que construían, finalmente se les pierde la pista sobre el siglo XIII. Hasta nuestros días, la causa de su éxodo (si fue por un incipiente cambio climático o por enemigos que los persiguieran) sigue siendo un misterio para nosotros. De hecho, la única tribu que pudo haberles hostigado (por proximidad temporal) eran los navajos, pero estos no llegaron hasta casi un siglo después de la desaparición de los Anasazi.

Sus últimos asentamientos fueron unas increíbles fortalezas construidas al pie de acantilados, de difícil acceso y muy adecuados como centro defensivo, además de poseer en algunos casos torres de vigía. Sin embargo, no sabemos de quién huían o a quién temían.

También se baraja la posibilidad de un cambio climático que los obligase a buscar otras tierras cada cierto tiempo. Existen pruebas de una fuerte sequía allá por el siglo XII en la zona del Cañón de El Chaco, aunque no parece posible que una sequía terminase con una cultura al completo. ¿Explicaría esto que en sus últimos tiempos recurrieran al canibalismo?

En asentamientos Anasazi se han hallado restos humanos desmembrados, huesos quebrados (quizá para extraer el tuétano) y la ausencia de cabezas, manos y pies. También se encontraron los restos de dos jóvenes entre los restos de una hoguera.

Hasta ahora, y como en el caso de otras antiguas civilizaciones, lo único que podemos hacer es especular. Las dos teorías más aceptadas son la de una división interna, que enfrentara a dos o más facciones de Anasazis, o las posibles incursiones de los aztecas procedentes de México.

Quizá fue una mezcla de ambas la que propició la misteriosa desaparición de una cultura floreciente y poderosa, que llegó a dominar buena parte del territorio norteamericano, así como la arquitectura, la agricultura y la astronomía. En algunos de sus edificios conocidos como «Kivas», encontramos marcadores para indicar, por medio de la luz del sol, la fecha exacta del solsticio.